martes, 1 de noviembre de 2011

ALIMENTOS TRANSGENICOS: ¿COMIDA PARA TODOS? (I)

El ser humano siempre tiene preguntas y siempre busca respuestas. A través de indagar y explorar el hombre ha ido acumulando conocimientos e inventando tecnologías para tratar de comprender el mundo que lo rodea e incluso lo que está más allá de éste. Es innegable que en lo que lleva de existencia el hombre siempre ha tenido sólo fe. No sólo en la divinidad sino en su capacidad para transformar su entorno, haciéndolo cada vez más cómodo para su existencia. El hombre, en resumidas cuentas, tiene confianza en un futuro con progreso basado en el continuo avance de la ciencia y tecnología que, quizá de forma soberbia, supone que llevará a remediar todas sus necesidades como nos lo da a entender John Gray en su ensayo Una ilusión con futuro.[1]
Es fácil observar como se ha llegado a dicha conclusión. Hoy se cuenta con una base de conocimientos que no se ha visto en el transcurso de la historia, se ha podido transformar la condición humana de una forma nunca imaginada por nuestros predecesores. Y aún con todos estos cambios parece que aún queda mucho por hacer, por explorar, por transformar para nuestro beneficio.
El progreso es entonces sea inevitable e inobjetable. Sin embargo como en toda actividad no hay ganancias sin pérdidas. El progreso no significa necesariamente el bienestar de la humanidad. Cierto, actualmente se han controlado muchas enfermedades que amedrentaron a nuestros antepasados, podemos viajar distancias enormes en breve tiempo, tenemos maquinas que nos facilitan el trabajo físico  y, también bombas que son capaces de matar millones de personas en segundos, un medio ambiente cada vez más deteriorado. Si bien el conocimiento ha transformado el entorno no ha bastado para colmar nuestras necesidades. Por ejemplo millones de personas en todo el mundo sufren hambre o son victimas de malnutrición. Seguimos, incluso con toda la ciencia de que se vanagloria la humanidad, enfrentándonos con la nada apreciable plaga del hambre y con lograr la seguridad alimentaria de un mundo cada vez más poblado en la que los recursos son más escasos.
No se pueden soslayar las oportunidades que nos ofrece el orgullo de una de las características de nuestra condición humana actual: nuestra fe en la ciencia. Esta, nos ofrece una opción léase con atención esta palabra para el problema del hambre y de la seguridad alimentaria. En consecuencia, la pregunta clave es ¿ayudarán los transgénicos a erradicar el hambre de nuestro planeta? ¿Por qué si? ¿Por qué no? El problema del hambre va más allá de la producción de alimentos también es, claramente, una problema de fuertes componente sociales. Analizar el problema desde diversos ángulos nos permitirá valorar los intentos de solución para arrostrarlo. Es lo de hoy, somos la sociedad de la información, debemos buscar, hallar respuestas, abrir posibilidades.
Un problema tan grave como el hambre requiere de una discusión alejada de enconamientos que sólo permiten distinguir las ventajas y desventajas a secas. Sería una lástima ignorar la posibilidad que la ciencia nos otorga de tener alimentos más productivos o con los requerimientos nutricionales más adecuados. Por otra parte, sería una irresponsabilidad desestimar las consecuencias de los mismos. En todo caso no hay que olvidar que el objetivo es mejorar la condición humana.
Estas líneas son una contribución al debate que actualmente se lleva a cabo por la introducción de alimentos transgénicos. El objetivo es plantear la posibilidad de usarlos en la erradicación del hambre, no es un asunto sencillo, hay muchos aspectos que valorar, ninguno de menor importancia. Pero ¿no la ciencia nos ha puesto siempre en este dilema? La humanidad siempre tendrá  la última palabra entre construir una planta nuclear para llevar electricidad a miles de hogares o construir armamento nuclear. Estamos en este punto, ¿que hacer con esta tecnología?


[1] Gray , John, "Una ilusión con futuro" en Letras Libres, México.

1 comentario:

  1. Hola Marisol, en principio me parece bien esta entrada, sobre todo que pones sobre la mesa el asunto de la fe en el progreso con ayuda de la ciencia y la tecnología. Sin embargo, habría que especificar más las preguntas, de otra manera el problema se alargaría dada la enorme cantidad de discusiones alrededor de la viabilidad de los transgénicos como opción alimentaria. También me gustaría que especificaras en esta entrada la ruta que vas a seguir en el desarrollo de tu investigación, por supuesto depende de las preguntas que vas a afinar. Así que tienes dos opciones, afinar las preguntas y luego, basada en ellas, incluir lo que ya tienes por ahí o incluir el material nuevo donde posiblemente ya ya se aclare por donde vas. Estamos en contacto.

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